Introducción

Si llevas un tiempo desarrollando con Spring Boot, probablemente ya te has topado con uno de los errores más frustrantes: respuestas HTTP desordenadas o mensajes de error que no ayudan en nada. En Pulsosoft lo hemos visto muchas veces: el problema casi siempre está en no manejar correctamente las excepciones.

1. El síntoma: errores genéricos por todos lados

Seguro te ha pasado que un endpoint falla y el cliente recibe un mensaje genérico como Internal Server Error. No sabes qué ocurrió, ni el usuario tampoco. Esto sucede porque Spring Boot, por defecto, no muestra detalles de excepción si no los defines correctamente.

2. El error raíz: no tener un manejador global

Un error común es manejar las excepciones dentro de cada controlador, lo que genera duplicación y desorden. La solución es crear una clase centralizada para capturar y responder los errores de forma uniforme.

@ControllerAdvice
public class GlobalExceptionHandler {

    @ExceptionHandler(ResourceNotFoundException.class)
    public ResponseEntity<String> handleNotFound(ResourceNotFoundException ex) {
        return ResponseEntity.status(HttpStatus.NOT_FOUND).body(ex.getMessage());
    }

    @ExceptionHandler(Exception.class)
    public ResponseEntity<String> handleGeneral(Exception ex) {
        return ResponseEntity.status(HttpStatus.INTERNAL_SERVER_ERROR)
                             .body("Error interno del servidor: " + ex.getMessage());
    }
}

Con este enfoque, cualquier error será interceptado y devuelto con un formato claro y profesional.

3. Beneficio: una API más confiable y limpia

Además de mejorar la experiencia del usuario, tener un manejador global facilita el mantenimiento. Si en el futuro cambias tu formato de respuesta o agregas nuevos tipos de error, solo lo haces en un lugar.

4. Buenas prácticas extra

• Define tus propias excepciones personalizadas (por ejemplo, InvalidDataException).
• Usa logs con contexto para depurar fácilmente (log.error("User not found", ex)).
• Evita mostrar mensajes sensibles al usuario final.

Conclusión

El manejo de excepciones es una de esas cosas que parecen pequeñas, pero marcan una gran diferencia en la calidad de tus aplicaciones. Un buen desarrollador no solo escribe código que funciona, sino código que responde bien incluso cuando falla. 💡